Vaya que en fechas religiosas el consumismo se aprovecha de la situación para trastornar una fecha religiosa en un día repleto de compras con las que suponen los comerciantes, demostrarás que quieres a tus seres queridos, mentiar más grande creída por más de uno. Pero vamos, que no hay que ser emo aguafiestas y un regalito nunca cae mal.
No he escrito, ni tengo ganas, ni tengo medio (luego aclaro), pero hoy en verdad os digo que pasé un San Valentín arruinado por ciertas personas, pero contrastando, recibí alguna que otra sorepresita.
Lo bueno del día fue que casualmente me llegó Scarface: The World Is Yours, videojuego para la afamada consola de Nintendo, el Wii. El juego me parece, uff, excelente, y se lo recomiendo a cualquiera que guste de largas aventuras cargadas de acción por pequeñas partes en un largo y complejo mundo al cuál debes conquistar, muy al estilo GTA: San Andreas, aunque en mi opinión es superado por Scarface.
Para quién no sepa qué es "Scarface", ya he hablado del tema antes, pero "Scarface" es un peliculón dirigido por el señorón Brian DePalma y con el mejor actor de todos los tiempos, Al Pacino. La trama se desarrolla en Miami, después de que cientos de barcos cubanos llegan por el Éxodo de Mariel, y entre ellos está Antonio "Tony" Montana, hombre de grandes sueños con antecedentes criminales. Tony llega con todas las esperanzas de cambiar su situación que tenía en Cuba, pero descubre que no todo es como en las películas (vaya la ironía) y la mejor manera para convertirse en un millonario de cara dura es mediante los negocios sucios.
Advertencia: Spoilers a la deriva
Al final de la película Tony Montana ya tiene un largo imperio, pero debido a problemas de ética con un capo colombiano de las drogas, su mansión es invadida por decenas de hombres con un sólo objetivo: asesinarle y acabar con su imperio. Tony logra matar a muchísimos después de que penetrarán hasta su oficina pero los sicarios cumplen su objetivo. Aquí es donde comienza el juego, en el tiroteo en su mansión y supone que Tony sobrevive por poco, teniendo que reconstruir su imperio de nuevo desde cero.
Creo que ya me emocioné tanto que me desvíe del tema.
Está bien, esa fue la parte buena de mi día, aunque nadie lo planeó así.
Aclaro, días antes encargué vía
Mercadolibre el dichoso juego, y sin yo saber nada, me llegó por
Multipack a la hora de la comida, detalle que me alegró mucho el día.
Lo malo. Las desilusiones que conlleva una gran responsabilidad (¿?). Ustedes entienden.
Pero además, el que me informaran que
mi laptop se fue al diablo porque se le quemó la tarjeta madre. ¿Por qué se le quemó? El sobrecalentamiento global que incluye la instalación de
Windows XP o el deceso autoejecutado por mi laptop dado que le quité
Ubuntu y metí el CD de instalación de
XP.
El caso es que primero fue todo un problema lo de las particiones, y cuando lo lográ hacer,
Windows me decía que a fuerzas tenía que usar todo el disco duro, y bueno, ahí le hago caso. Luego ya por fin pude ver el cuadro de instalación del sistema y dí por hecho que se completaría sin mas. El resultado fue otro.
Me fui a ver la televisión, no soy nada friki como para quedarme viendo la instalacion y dar alaridos por cada porciento que avance, mucho menos con
Windows. Al regresar mi laptop tenía la pantalla negra y ya no prendía; se le quemó en un dos por tres la tarjeta madre.
También ya tenía sus días atrás, pero el 14 me lo informaron con toda la crueldad del mundo. Iba a decir otra cosa, pero lo que es la memoria y el desvaríe te aturden, mezclado con una televisión a todo volumen a tu lado derecho.
