La moneda de plata

No es el título de un libro, ni de una película, ni siquiera tiene que ver con algún arte, pero más bien con la economía.
En los últimos meses se ha creado una campaña, podríamos decir viral, que consiste en concientizar y difundir los beneficios que representa usar la plata como moneda, campaña patrocinada y dirigida por Hugo Salinas Price, presidente de la Asociación Cívica Mexicana Pro Plata.

Antes de decir nada, haré un pequeño repaso a la historia. Antes, mucho antes de que los billetes empezaran a circular, el intercambio de bienes se realizaba haciendo equivalencias (mejor conocido como "te doy dos gallinas por tu oveja"), y con el tiempo se vio la necesidad de crear un sistema financiero que estableciera normas para regular trueques, intercambios y adquisiciones. Dado que los tres metales preciosos son oro, plata y cobre, se dijo que su valor era tan grande, que debería acuñarse en pequeñas porciones redondas para después usarlas no para adornar, sino para cambiarlas por bienes, a manera de evitar estafas, de "dar gato por liebre" y tener precios definidos.
Tiempo después, en el siglo XIII, época del viajero y mercader Marco Polo, Occidente contactó con Oriente, aprendiendo muchas cosas de aquellos lugares recónditos. Mas bien, el padre de Marco, Niccolo Polo habia realizado viajes antes de Marco, y en uno de esos trajo con él a Europa un par de muestras de papel moneda perteneciente al imperio Mongol. Demostró varios beneficios que tenía el papel moneda, además de que podía ser cambiado en cualquier momento por moneda real. La propuesta no agradó mucho al Consejo de aquella Italia dividida, las burlas hasta llegaron, alegando que si se rompía, quemaba, mojaba perdías tus ganancias y en sí era una estafa que te dieran papel por oro u otro metal.
Para el siglo XVII el papel moneda ya se utilizaba en muchas partes por su facilidad de uso y de transporte, pero en México todavía seguía vigente la moneda real, moneda ejemplar en todo el mundo; el mismo dólar estadounidense está basado en la moneda conocida como "Ocho Reales", moneda impresa en México.
México se "modernizó" y empezó a circular moneda papel paralelamente a la moneda real, hasta que un buen día la real se dejó de usar casi por completo.

Al llegar el siglo XX, llegaron muchos avances científicos y tecnológicos. En México se vivió la Revolución Mexicana, evento que al terminar pareció restablecer el orden civil, político. La estabilización fue llevada de la mano por el PRI [Partido Revolucionario Institucional], partido autoritario y tahúr de la democracia, que encubría muchos fraudes, asesinatos y robos efectuados por ellos mismos.
El peso mexicano inició el siglo XX como una moneda que ofrecía esperanza y el paso a una mejor vida para muchos habitantes de la República. Este sueño fue truncado por el PRI, que con cada año y robo, garantizaba una segura devaluación de la moneda papel. En otras palabras, con cada nuevo presidente tu dinero se hacía cada vez menos.
Las devaluaciones fueron impresionantes, pero seguro la devaluación con mayor impacto para la sociedad fue la que se vivió con Carlos Salinas de Gortari, el presidente más joven de México, en su sexenio 1988-1994. Lo que hizo este interesante personaje por su movimientos maquiavélicos fue robar, no en moneda papel, sino robar en moneda real, vaciar las arcas nacionales donde se almacena el oro y la plata (moneda real) y llevárselo al extranjero. Casi la totalidad de denunciantes de sus atracos fueron callados con la pistola, y hoy, él vive muy feliz, pero con un gran cargo en la consciencia.

Todo esto demostró que la moneda papel no era nada estable y la potencia que tiene para arrastrarnos a la pobreza extrema. Si los gobernantes fueran sinceros, restituyentes, nada de esto se estuviera viviendo.

La moneda de plata nos garantiza lo que el papel no puede. Estabilidad, cero devaluación y la confianza de que nuestro dinero estará a salvo de las marañas políticas (de los asaltantes a mano armada es historia).
Poseer plata incremente el valor de compraventa, acrecentando el valor del dinero como lo conocemos hoy en día, lo que se podría resentir como comfortabilidad social.

México es un país que fue (es) rico en plata. Gran parte de el oro y la plata fue robada llevada a España, y a su vez, a Inglaterra.
Utilizar un metal que representa a México es un honor, pero sobre todo es una moneda que se adapta muy bien a los estándares de la población en general, generando casi una mejora en la vida de los mexicanos. Además, tendríamos una moneda modelo para el mundo entero.

Por otra parte usarla también presenta riesgos. La criminalidad actualmente está muy elevada por sectores. Matar por una moneda de plata es bastante factible, aunque dentro de los frutos del uso de la plata se vaticina una lógica baja en criminalidad; nada se puede asegurar con certeza.
Otro problema es que el robo se efectúe llevándoselo al extranjero y cambiarlo clandestinamente por dinero de otro país o reservándoselo para el nunca. Una tangente representa que las monedas literalmente se pierdan. Quiere decir que si perdemos una moneda, se "hunde", se derrite (en casos extremos) o cualquier otra cosa que se te ocurra, simboliza una pérdida, un golpe directo a la economía del país. Sería imitar a microescala una acción de Salinas de Gortari, claro, sin querer. Como si sustrajéramos un lingote del arca nacional y lo lanzáramos al golfo.
En cambio el papel moneda es reemplazable. Si se quema, se rompe, se pierde, no representa ninguna pérdida para las arcas ya que éstas están intactas. Tan sólo se reimprimen billetes o monedas y listo.
Dudo mucho un extravío masivo de plata, así que creo es un punto que llega a afectar, pero no demasiado.

La propuesta de Salinas Price por su parte es bastante tentadora, una verdadera reforma monetaria. No habría devaluación, ni los precios se afectarían por acciones políticas, cosa que salvaría de otro desbanque a los mexicanos.
Pero eso sí, la inflación es inevitable, ya que al seguir usando moneda fiduciaria (como él mismo especifica) seguiríamos dependiendo del dólar estadounidense, ya que el mismo peso mexicano tiene como base al dólar. La inflación en términos de la moneda de plata no figura como un punto negativo. Simplemente estamos atados a la adquisición de dólares para las reservas por parte del Banco Central y con ello a la inflación.
México tendría una moneda superior al dólar elevando la calidad del mercado mexicano, que a su vez puede iniciar un intercambio de dólar a moneda de plata a gran escala. Con ello el Banco Central no se vería en la necesidad de adquirir dólares, y la inflación se convertiría en pequeños soplidos.

Hoy en día vemos mucho apoyo comercial, mas no un aplastante apoyo ciudadano. Políticamente todavía no es viable poner en circulación a la moneda de plata para el uso convencional. Una manera en la que ha pensado Hugo Salinas, podría cambiar la opinión política, sería que nos vieramos en una situación de hiperinflación o deflación devastadora. El Banco Central pondría en marcha la moneda de plata, frenando a la hiperinflada moneda fiduciaria. Recordemos que la plata no se afecta, ya que su valor siempre es el mismo, y si eso cambia, de una u otra manera siempre tendrá una cotización elevada.

En resumen, la moneda de plata aparenta y puede ser una gran alternativa a la moneda papel. Estaríamos libres de ver catástrofes financieras que reincidan sobre nuestras reservas internas. No evitaríamos la pobreza ni tampoco propone que la clase medio se vuelva alta, sino que las riquezas procuren elevarse y no descender por cuestiones políticas.
En mi opinión, apoyo el empleo equidistante de la moneda plata y la fiduciaria.

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