Robando Entradas

Es extraño. No tengo mucha fama, los visitantes son pocos y los comentarios escasos. Apenas llego a 19 referentes en Technorati y tengo más o menos 50 lectores vía e-mail.
Parece gracioso, porque a medio año de un blog no he llegado muy lejos. Por más que escribo entradas no puedo atraer público. Lo sé, estoy consciente y también se que todo sucede porque no me dijo en un tema. Es un poco de todo. Entradas inconsistentes de varios temas mezclados, pero varias, vaya que ya me acerco a las 400. Ni tengo contactos, jamás me he esforzado por ganar la atención de un blogger importante o resaltar en otros lugares.

Pero no vine a lamentarme, ya que no es mi propósito, aunque me encanta bloggear en todos los sentidos.


Cuando ganas fama, cuando ya tienes nombre en la blogosfera, tu opinión se vuelve indispensable en muchos temas y hasta puede mover masas. El blogger gana renombre, gana admiración y hasta dinero.
Cuando yo creé mi blog lo hice sin saber o conocer otros blogs. Lo hice con razón de compartir mis ideas y cosas con las personas comunes, con los lectores casuales. Con el tiempo gané visitas, gané adeptos, pero me trabé en una posición. Empezé a leer otros blogs como hombrelobo, el Pito Doble o UbuntuLife. De cierta forma copié la raíz de sus entradas ligeras que atraían a un amplio público.

Ahora estamos en fiestas decembrinas, de fin de año y vida nueva. Bien he crecido en entradas, educado en letras y trascendido en la web, con poco éxito y casi nula satisfacción. Eso no impide que me sigan saliendo ideas de la cabeza o que me despegue un día del teclado sin antes dejarles un texto a mi público.




Yo creo, y he de decirlo, yo creo que parte de mi no-éxito se debe a una cosa. Al plagio de entradas. Jamás he copiado una entrada sin antes haberle acreditado a su autor el reconocimiento que merece, pero yo siento que me han robado las entradas.
Quizá se creen muy graciosos al decir "Es tan vagamente conocido y poco importante que puedo saquear sus ideas para ponerlas en mi blog". Puedes decir que yo lo hecho, pero no es así, ya que robar una entrada es ponerla, íntegra o parcialmente, sin acreditar ni el nombre del autor. En cambio acreditando al autor, al blog, estamos tomando prestada una entrada en un día de opaca imaginación o en un momento de algidez textual.

¿Por qué lo aseguro? Porque casualmente he visto dos o tres blogs de renombre hablando del mismo tema que yo en un corto plazo de tiempo. Por supuesto, después de mi entrada, a horas o días de su publicación.
Es demasiada coincidencia, tal vez lo hicieron en ignorancia de la mía, pero tres blogs significa conspiración. No puedo creerlo cuando lo veo, y hasta busco hipervínculos que redirijan hacia este humilde blog.

A los bloggers les pido, que acrediten, que pongan las fuentes, porque estoy muy molesto, sobre todo viniendo de exitosos escritores digitales. Además pierden confianza y fe, siempre y cuando la demanda del afectado sea expuesta al público y conocida por la gente, porque de otro modo, mejor dicho a mi manera, nuncá se sabrá la verdad y todos pensarán que tú le copiaste al prestigioso, como suele suceder.

Por cierto, al buscar una imagen para la entrada me encontré con ésta de la parte superior que me ha hecho mucha gracia para el blog.

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